¿Es la contabilidad el lenguaje de los negocios?
¿Es la contabilidad el lenguaje de los negocios?
Desde que iniciamos a estudiar en la universidad aprendemos que la contabilidad es el lenguaje de los negocios. Dicho sea de paso, existen apasionados de esta ciencia que pregonan: “Si alguien va a estar en los negocios y no entiende contabilidad no debería estar en el negocio”. En principio, este tipo de afirmaciones promovería una formación en contabilidad cuasi obligatoria para toda persona que quiera incursionar en los negocios.
En el mundo de los negocios buscamos comunicarnos de la misma forma, para ello la información contable tiene que ser leída en cualquier parte del país y del mundo. Desde esa idea nacieron las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), para que los estados financieros tengan un lenguaje universal, es decir, que una empresa en Perú tenga el mismo lenguaje de una empresa que opera en otros países del mundo.
Este lenguaje ha sido estandarizado y mejorado y a nivel mundial por las NIIF, para que podamos conocer mediante un análisis cuantitativo de los “hechos pasados” los resultados de una empresa a un momento determinado, lo que en el lenguaje contable se le denomina “período”. Dicha información histórica es un importante insumo, que nos permite realizar un análisis prospectivo para un planeamiento financiero.
Ya en el universo de las NIIF, recientemente se ha emitido la nueva norma “NIIF 18” que modifica la forma de ver los resultados en los negocios haciendo que los estados financieros sean aún más comparables. Por esta y muchas otras razones, conocer y dominar el lenguaje contable es relevante para el éxito en los negocios. La contabilidad comunica la información financiera de los negocios; por lo cual, posee un importante protagonismo en el quehacer empresarial.
La Real Academia Española (RAE) define al lenguaje como una habilidad innata de los seres humanos para llevar a cabo la lengua y el habla de forma oral/escrita. Pero ¿qué quiere decir que un lenguaje sea universal?, en principio, ¿un lenguaje puede ser universal? La música es concebida como un lenguaje universal, la ciencia nos brinda conocimientos científicos universales, y la contabilidad es una ciencia, por lo tanto, la condición universal tendría también alcance a la contabilidad.
En contraparte, el idioma se emplea dentro de una comunidad o comunidades en común. Entonces, si bien la información financiera está al alcance de todo el público, no cualquiera puede llegar a interpretarla y analizarla. Es importante conocer de contabilidad si estamos en la comunidad de los negocios.
Por lo tanto, ¿no sería mejor pensar que más que un lenguaje, la contabilidad es el idioma de los negocios? Desde un modesto punto de vista, podemos aventurarnos en afirmar que la contabilidad es un lenguaje y las NIIF representa su idioma estandarizado.
En el mundo de los negocios buscamos comunicarnos de la misma forma, para ello la información contable tiene que ser leída en cualquier parte del país y del mundo. Desde esa idea nacieron las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), para que los estados financieros tengan un lenguaje universal, es decir, que una empresa en Perú tenga el mismo lenguaje de una empresa que opera en otros países del mundo.
Este lenguaje ha sido estandarizado y mejorado y a nivel mundial por las NIIF, para que podamos conocer mediante un análisis cuantitativo de los “hechos pasados” los resultados de una empresa a un momento determinado, lo que en el lenguaje contable se le denomina “período”. Dicha información histórica es un importante insumo, que nos permite realizar un análisis prospectivo para un planeamiento financiero.
Ya en el universo de las NIIF, recientemente se ha emitido la nueva norma “NIIF 18” que modifica la forma de ver los resultados en los negocios haciendo que los estados financieros sean aún más comparables. Por esta y muchas otras razones, conocer y dominar el lenguaje contable es relevante para el éxito en los negocios. La contabilidad comunica la información financiera de los negocios; por lo cual, posee un importante protagonismo en el quehacer empresarial.
La Real Academia Española (RAE) define al lenguaje como una habilidad innata de los seres humanos para llevar a cabo la lengua y el habla de forma oral/escrita. Pero ¿qué quiere decir que un lenguaje sea universal?, en principio, ¿un lenguaje puede ser universal? La música es concebida como un lenguaje universal, la ciencia nos brinda conocimientos científicos universales, y la contabilidad es una ciencia, por lo tanto, la condición universal tendría también alcance a la contabilidad.
En contraparte, el idioma se emplea dentro de una comunidad o comunidades en común. Entonces, si bien la información financiera está al alcance de todo el público, no cualquiera puede llegar a interpretarla y analizarla. Es importante conocer de contabilidad si estamos en la comunidad de los negocios.
Por lo tanto, ¿no sería mejor pensar que más que un lenguaje, la contabilidad es el idioma de los negocios? Desde un modesto punto de vista, podemos aventurarnos en afirmar que la contabilidad es un lenguaje y las NIIF representa su idioma estandarizado.